Dimissioni
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Mansión de Di Strada Famiglia, 28 de diciembre.
Oficina de Don Bufalino
La oficina del Don tenía una tonalidad granate que rodeaba todo el salón, en las paredes habrían fotos, paisajes, títulos hasta incluso discos. En medio habría un asiento negro que se situaba detrás de una mesa curva de madera oscura y detrás dos gigantes librerías con un gran almacenamiento en su interior.
Delante de la mesa se encontraba Julissa con una carta en la mano zurda y una lapicera en la mano derecha siendo apoyada en el papel mientras dejaba un tinte en el mismo.
* Julissa apoya la lapicera situada en su mano diestra al papel que tenía en frente a la altura de la mesa y comienza a dibujar letras para así formar una carta.
Mientras Julissa escribía, poco a poco se podía leer la carta que decía lo siguiente:
Ci vediamo, famiglia. Apprezzo il mio soggiorno qui, ma è ora di andare. Mi dispiace. Fai progressi il più possibile e continua a crescere, sarò orgoglioso di te. Ti aspetto all'aeroporto abbandonato di Las Venturas. Disarmato, solo e senza barare.
Cordiali saluti: Lizzy
* Julissa seguiría escribiendo en la hoja, ya las últimas palabras estaban por ser situadas en la esquina inferior derecha de la carta.
Happy April Fools Day
La tinta de las letras que estaban en la hoja eran de color marrón igual que el exterior de la lapicera sostenida por Julissa. La hoja estaría en buen estado, sin arrugas ni suciedad encima de ella.
* Julissa suelta la lapicera para que quede reposando arriba de la carta anteriormente escrita por ella. Acto seguido hace fuerza con sus piernas para así pararse y caminar hacia la puerta de la mansión.
Mientras Julissa caminaba, varios recuerdos pasaban por su cabeza mientras veía los diferentes salones dentro de la mansión y sus acontecimientos que vivió en ellos.
Exterior de la Mansión de Di Strada Famiglia.
Varios vehículos negros estarían estacionados en su respectivo orden y lugar. Se veía a Julissa llegando a las rejas de la mansión mientras miraba fijamente al Sicario que vestía un uniforme negro y que parecía tener más de 50 años de edad controlando la reja.
Julissa: Che, abrí las puertas por favor. Me tengo que ir. -mientras hacía una señal con su diestra a la visión del Sicario-
Sicario: Claro. Con gusto. -mientras oprimía el botón para abrir la reja exterior de la mansión y cederle el paso a Julissa-
Julissa: Ci vediamo. -dijo sin mirar atrás y continuando el paso hacia BlueBerry-
Fin
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